Panamá podría tener un presidente gay.

Ser presidente de la República es una responsabilidad y un honor para quien ostenta ese cargo, la sociedad espera una persona intachable y de buenos principios, sin importar su raza ni religión...

 

 

 

 

 

En el mundo, inclusive en Panamá, hubo casos históricos, en los que han llegado al poder personas que nunca lo imaginaron.

Por ejemplo, en Bolivia, Evo Morales alcanzó la Presidencia, convirtiéndose en el primer indígena en ocupar el magno puesto.

En Estados Unidos, el actual presidente, Barack Obama, hace historia al dirigir esta nación siendo negro; en 1999 en Panamá se elige a Mireya Moscoso como la primera mujer que preside el país.

El artículo 178 de la Constitución establece dos únicos requisitos para ser presidente: mayor de 35 años y ser panameño de nacimiento.

Entonces, si no existen inconvenientes raciales ni de géneros para ser presidente, Panamá, en un futuro, ¿podría ser dirigido por un homosexual?

Hay asociaciones que defienden los derechos de estos ciudadanos, conocidos también como gais, quienes luchan por ser aceptados en la sociedad. Quizás podrían formar un ‘gabinete rosa’ para tomar el rumbo de esta nación, lo que eliminaría la figura de una primera dama.

 

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